Rizada, lisa, ondulada... no importa la textura o color. Si refleja la luz adecuadamente, todo el mundo verá en esa melena un señor pe-la-zo. De hecho, el brillo suele ser una de las señales externas más claras de que el pelo está sano. Sin embargo, lograrlo, dada la vida que le solemos dar, con secadores, planchas, decoloraciones y coletas tirantes, no es tan sencillo como podría parecer.

Más allá de remedios populares con más o menos base científica, como el aclarado con vinagre de manzana, hay un horizonte de cosméticos dedicados a pulir la fibra capilar para que parezca un espejo. Si no que se lo digan a Kate Middleton o Blake Lively, personalidades reconocidas por el fulgor de su melena, inalterable ante cualquier circunstancia hasta convertirse en su seña de identidad.   

¿Tú también quieres ese efecto glow capilar? Toma nota de la rutina definitiva para incrementar el brillo del pelo fácilmente:

Empezamos por la base, el cuero cabelludo. ¿Está en plena forma? Si se siente seco, excesivamente graso o experimenta descamaciones es el momento de incluir un tratamiento pre-lavado como este. Se trata de una crema suave con base de arcilla caolín para purificar. Aplícala por mechones, deja reposar cinco minutos y directa a la ducha para retirarla con un suave masaje para seguir con el resto de pasos.

A continuación, aplicamos el champú. En caso de que laves tu cabello a diario, puedes alternar uno de uso diario más suave con otro más activo o simplemente apostar por este último, si tu frecuencia es de un par de veces por semana. En ambos casos te proponemos este destinado a cabellos “asfixiados” por los agresores urbanos, como la contaminación. Deja un acabado fresco y suelto, con un aroma herbal protagonizado por el eucalipto.  

El acondicionador te ayudará a desenredar fácilmente, suavizar y evitar que el cabello se rompa o descame mientras está húmedo y más vulnerable. Utiliza un peine de púas anchas, aplica una cantidad suficiente de un producto como este, con antioxidantes como el aceite de roucou o la vitamina E, de medios a puntas y espera unos minutos. Notarás la fibra capilar más elástica, hidratada y sedosa, lo que indirectamente potenciará la luminosidad. 

El aceite suele ser una respuesta obvia a la hora de recuperar una melena mate. Pero no sirve cualquier tipo, ya que su textura naturalmente oleosa puede ser difícil de retirar, obteniendo el efecto contrario: plano y apagado. En esta mascarilla de uso semanal encontrarás tres variedades reconocidas por su capacidad para revitalizar hasta el caso más castigado: aceites de argán, marula y camelia, en una textura suntuosa que no engrasa. 

Antes de salir de la ducha, utiliza un producto exprés para abrillantar aún más el pelo como este superventas de Elvive. Se trata de un líquido que, en solo ocho segundos, al entrar en contacto con el agua y masajear, se activa creando una película protectora alrededor de cada fibra. Al momento notarás más suavidad y cuando seques, un aspecto más saludable y resplandeciente, casi tan pulido como si hubieras usado el cepillo y secador. 

Ya con el albornoz puesto, seca sin frotar ni estrujar. Después utiliza un sérum para facilitar el peinado y acelerar el secado. Este de la marca francesa, Leonor Greyl, cumple veinte años con una legión de fans adictas a sus beneficios nutritivos, protectores frente a la radiación solar y acción de las herramientas de calor y de control del encrespamiento. Para lograrlo no apuesta por siliconas, sino por las proteínas de seda y los aceites de almendras y avellana bio. 

Una vez seca la melena puedes darle un punto más de brillo con este producto que se pulveriza al final del peinado. Fija ligeramente, aunque no es una laca, ya que su principal cometido es incrementar la reflectancia del pelo. No aporta peso ni enreda, dejando un tacto agradable al contacto con los dedos, con el fin de preservar ese aspecto saludable inmediato que proporciona. 

Imágenes: Cortesía de las firmas  

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